Apacible y en penumbras
Tan sólo el resplandor de la luna que se filtra.
Cobijado en la esquina del sofá,
bebes tu momento en pequeños sorbos.
Una copa de vino tinto como pretexto.
Permanencia infinita, constante, devota
te abstraes en el laberinto de tus palabras,
recorres tierras recónditas y perfectas
donde convergen magos, príncipes y lacayos
toda tu imaginación abocada
toda tu fascinación encendida.
tus pensamientos no son míos,
nada de ti me pertenece.
"Nada de ti me pertenece..." El final fue sorprendente, me gustaron los juegos de palabras. Bien sabes, que el pensamiento más ambiguo o el más certero, puede dejar huellas en una mente ajena... pero se comparte, sin duda.
ResponderEliminarNostálgicos versos, melodioso al leerlo.
Un placer recorrer tu espacio, un saludo cordial
Natu.-
Esto que has escrito es una preciosidad
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarPrecioso
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