Mientras duermes, yo te observo
con ojos de mujer enamorada.
Entrecierro los ojos,
los recuerdos vienen a mí,
cual ráfagas de viento en cálido otoño.
En mi mente te veo.
Traviesa sonrisa de niño bueno,
mirada de cómplice en andanzas certeras,
manos torpemente ansiosas cuando me acaricias…
Me dejo llevar por mis evocaciones.
te traigo a mi piel.
Eso basta.
Ahora, ya no duermes…
con ojos de mujer enamorada.
Entrecierro los ojos,
los recuerdos vienen a mí,
cual ráfagas de viento en cálido otoño.
En mi mente te veo.
Traviesa sonrisa de niño bueno,
mirada de cómplice en andanzas certeras,
manos torpemente ansiosas cuando me acaricias…
Me dejo llevar por mis evocaciones.
te traigo a mi piel.
Eso basta.
Ahora, ya no duermes…