domingo, 29 de noviembre de 2009

Por Siempre y Jamás


Vivirás en mis recuerdos,
mientras recuerdos mantenga.
Persistirás en mis olvidos,
aunque olvide por olvidarte.
En mis momentos de locura constante
y de febril prudencia,
siempre serás tú el motivo,
de mis llantos insonoros y mis risas candorosas,
mis lamentos, mis silencios.
Te eternizarás en mis adentros
por siempre y jamás
por ser lo prohibido, lo perfecto y lo imperfecto,
a las 11 y 2 minutos de una noche de domingo.

lunes, 21 de septiembre de 2009

El Secreto


Tú eres pasión, aventura, lujuria
más me suenas a remanso, a paz y a lluvia.
Me sabes a música de piano y violín
a dulce de membrillo y mermelada de naranja
a mares,
inmensos y profundos.
Mi alma existe sólo por tus sensaciones.
¿Mis pensamientos?
Maraña de caricias impuras.

Quiero vivir hundida en tu piel
En tu pecho, en tus labios.
Bailar al compás de tus caricias
Hundirme en el reflejo de tu imagen
Descubrir el secreto de vivir sin ti
y contigo al mismo tiempo.

domingo, 21 de junio de 2009

Mi Amado Ausente

El dulce susurrar de la mar me despierta.
Los rayos de luz se filtran por la ventana,
bañada toda ella con gotas de rocío.
Todo lo demás es silencio.
Siento la omnipotente presencia de tu ausencia.
Dejaste únicamente tus desvanecidas sombras,
que en vano trato de retener.

Al ponerse el sol, me siento junto a la ventana.
Ahora, gotas de rocío bañan mi cara
cual perlas apenas suspendidas.
Súbitamente y por sólo un instante,
de lo más profundo de mis sensaciones
el sabor de tus melodiosas caricias
y tus palabras de deseo me abordan.

Quisiera tener alas para alcanzarte.

lunes, 1 de junio de 2009

Dulce amor


Ni la más densa neblina de la noche
ni el torrencial diluvio de invierno
impedirá que la intrusa calidez de mi ser te alcance.
No temas, dulce amor.
Navegarás por las praderas de mi cuerpo
coronarás las más altas montañosas
poseerás los valles más profundos,
beberás lluvia de infinitas estrellas
bailarás en magistrales conciertos
y entonces, seremos uno.

miércoles, 18 de marzo de 2009

Mi tierno ángel


Una noche fría de verano inquieto
un tierno ángel se cobijó
en mis brazos.

Mil promesas de amor me hizo:

“Colgaré estrellas doradas en el cielo,
Trasladaré la luna azul a tu ardiente lecho,
Celestiales cánticos velarán tus sueños,

todo por ti, mi dulce amor”

Desperté colmada por su gentil mirada,
su tierno rostro, sus bellas palabras,
sus caricias sublimes, sus besos.

Maravillosa criatura, etérea y luminosa
Quédate dentro de mi alma misma,
y ya no habrán más noches frías.

jueves, 12 de febrero de 2009

Evocaciones


Mientras duermes, yo te observo
con ojos de mujer enamorada.
Entrecierro los ojos,
los recuerdos vienen a mí,
cual ráfagas de viento en cálido otoño.
En mi mente te veo.
Traviesa sonrisa de niño bueno,
mirada de cómplice en andanzas certeras,
manos torpemente ansiosas cuando me acaricias…
Me dejo llevar por mis evocaciones.
te traigo a mi piel.
Eso basta.
Ahora, ya no duermes…

domingo, 8 de febrero de 2009

En tu ausencia


En tu ausencia, la vida se sigue viviendo


lunes, 2 de febrero de 2009

Anhelante

Yunphoto.net


Despierto complacida,
en noche clara de luna llena,
mi dulce amado a mi lado reposa,
exhausto por tanto amor compartido.

Mi corazón apasionado anhela
que remonte su exquisita esencia.
Su radiante fulgor me fascina!
Nuevas aventuras nos esperan
Destellos de verano en primavera.

domingo, 25 de enero de 2009

Abril




Súbitamente, las hojas deslucidas cambiaron de color,
la luna azul se vistió con el mejor de sus encantos,
y los capullos del durazno en flor,
exhalaron fragancias supremas,
todo sucedió cuando Él, dulcemente, le dijo:
“Volveremos a encontramos en abril”


El alba carmesí resplandece más que nunca,
su brillo acaricia suavemente la ligera escarcha nocturna,
fragantes velas vigilan un dulce pensamiento.
De su cuerpo, adornado con blancas orquídeas,
emana perfumes exóticos cuando Ella deja caer sus vestidos:
“Hoy es su abril”

martes, 20 de enero de 2009

Mis Hijos


He sido bendecida por la vida con dos maravillosos hijos, exactamente los hijos que le pedí a Dios que me conceda. Aún ahora continúo diciéndoles que si me hubiesen dado la opción de ir al "Supermercado de Hijos" a escoger los que yo quisiese, los hubiera escogido a ellos dos. Quizá está de más decir que el Supermercado hubiese sido Wong.

Yucsan, el mayor de mis hijos, a sus 27 años conserva esos cautivadores ojos llenos de inocencia, honestidad y bondad que no me pueden mentir, aunque lo intenten. Alegre, explosivo, impetuoso, noble y deliciosamente pícaro. Es la debilidad de muchas y la perdición de muchas otras.

Roberto, el menor y con 23 años a cuestas, está preocupado que no le alcance la vida para cristalizar todos sus sueños y le agobia apurar el paso para aportar todo lo que él le tiene reservado a este mundo. Detrás de toda esa seriedad, responsabilidad y sensatez, sus ojos lo delatan. Revelan al Roberto tierno, sensible y amoroso, encantador.

Ambos son seres sorprendentes, bellos, por dentro y por fuera. Sus defectos los dota de mayor perfección ante mis ojos de madre, porque los reconozco humanos.

Los amo y lo saben. Me aman y no lo ocultan. Me veo en sus ojos y me invade el orgullo. Son como son. Son tal como siempre los quise.